¿Acaso saben las flores
la belleza de su jardín?,
¿la rosa que duele su espina,
si muere entre el aroma
de su suspiro?
¿Acaso la vida tiene la palabra
justa,
el cierre perfecto,
la llave sin puerta?
¿Acaso sé si, disuelto mi ser,
será este que ya se desconoce?
No hay comentarios:
Publicar un comentario