Uno juega a la vida...


Uno juega a la vida,
se gana, se pierde,
camina por el mundo,
lucha contra sí mismo,
contra el otro,
contra algún díos.

* * * * * * *

No me falta la belleza
del paisaje,
sino un horizonte
que me acompañe
en mi travesía.


* * * * * * *
 
Me busco en mis ojos.
Mis ojos en mis ojos
se buscan.
¡Qué luces se apagaron,
que han dejado este acuoso
brillo
tras la lluvia
sobre un cristal sucio!

* * * * * * *

Entre mis manos
dejo este cerrado libro.
llegó a su fin la narración.
Lo dejo a la vista,
sobre el rincón cotidiano.

* * * * *

Aledaño a la autopista,
por un camino terroso,
un camión viejo,
cargado de forraje,
levantaba una densa nube
de polvo.
En la distancia, oculto
por la polvareda,
era la mística imagen
de la dolorosa carga
de la vida.

* * * * * * *

Consultas al espejo
en una constante interrogación:
¿sigo siendo el de antes?
 
* * * * * * * 
 
Todo lo que está hecho
con vanidad se rompe,
frágil es su esencia.
 
* * * * * * 
 
Bebe el pajarillo
del agua que apila
la fuente
y del caño, 
la boca avariciosa. 

* * * * * * 

Reposar la cabeza sobre
el aire,
llenarte de notas perdidas
y crear la melodía
de la calma.
 
* * * * * * 

Soy dos, tres, cuatro,
soy seis, mil y un millón,
soy treinta, noventa,
soy cien
y busco mi infinito uno. 

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