La pequeña fuente borbotea

La pequeña fuente borbotea
y es murmullo en el dulce silencio.
En los bancos se besan parejas jóvenes,
unas mujeres charlan de sus cosas,
un viejo piensa y calla.
Hay un gato gris pacífico
que ha hecho su hogar
al cobijo de un muro de seto
que hacen senderos en cruz,
brazos que van a la fuente.
El gato bufa al perro
y olisquea la bolsa
de un carrito de bebé.
De un lado a otro se cruza gente,
miran iglesias cerradas.
Hay estrechas calles
de adoquines y piedras del río,
bares bulliciosos,
plazas llena de chiquillos, padres y abuelos,
perros y amos.
En las esquinas se pierden los rastros,
por eso los perros las marcan
con sus orines.

Es un día de un siglo
con largo pasado,
mañanas de otros trayectos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario